Bugatti repasa su historia: EB110, Veyron y Chiron

Bugatti hace un repaso a su historia con los tres modelos referentes de las últimas tres décadas. El EB 110, el Veyron y el Chiron posando juntos.

Los amantas de Bugatti sueñan con tener algún día un modelo de estos tres mencionados. Por suerte, lo más adinerados sí poseen alguno de ellos pero son pocos, muy pocos, los que cuentan con la colección completa de estos modelos franceses. Bugatti los ha catalogado como la “Santísima Trinidad”.

Bugatti EB110 Super Sport

Este modelo es el abuelo, el viejo, el más longevo de esta gama. El Bugatti EB110 fue el primer superdeportivo de la era moderna. El coche diseñado por Romano Artioli, y presentado en 1991, llegaba con motivo del 110 aniversario de Ettore Bugatti. Como regalo de cumpleaños, la firma francesa presentaba un modelo de prestaciones casi inéditas.

Era el primer coche de serie fabricado en carbono y su ligero monocasco pesaba apenas 125 kg. Pero lo más alucinante de Bugatti es siempre su motor. Ese bloque escondido bajo la carrocería que cada modelo nuevo, nos sorprende más. En el caso del EB 110, estaba propulsado por un motor central V12 de 3.5 litros con cuatro turbos y una aguja de revoluciones que giraba hasta las 8.250 vueltas.

Este modelo estableció cuatro récords mundiales: aceleración más rápida (3,26 segundos), deportivo de producción en serie más rápido (351 km/h), deportivo más rápido impulsado por gas natural y coche más rápido de producción en serie sobre hielo. En 1995 se produjeron 96 unidades del EB 110 GT, así como 40 de la variante más potente, la Super Sport. Ambos dos con 670 CV.

Bugatti Veyron 16.4 Super Sport

El Veyron fue presentado en 2005 y marcó un comienzo de nuevo siglo que cambió por completo la forma de entender el concepto de un superdeportivo. El Bugatti Veyron era el primer y verdadero hiperdeportivo del mundo que entregaba 1.000 CV y tenía una velocidad máxima de más de 400 km/h.

Su motor W16 de 8.0 litros de desarrollo completamente nuevo, entregaba inicialmente 1.001 CV y un par motor de 1.500 Nm. Esto le permitía alcanzar los 200 km/h en poco más de 7 segundos y acelerar hasta los 100 km/h en 2,5 segundos. En 2010 se presentó la versión mejorada Super Sport que producía 1.200 CV y la velocidad máxima regulada era de 415 km/h. Ese mismo año, el Veyron se convirtió en el coche más rápido del mundo tras registrar 431 km/h de velocidad punta.

Bugatti Chiron

Este modelo sustituyó a su predecesor en 2016. La potencia máxima del Chiron es de unos desorbitados 1.500 CV y unos tremendos 1.600 Nm de par máximo. Este hiperdeportivo francés aceleraba 0-100 km/h en 2,4 segundos; de 0-200 km/h en 6,1 segundos y de 0-300 km/h en 13,1 segundos.

En 2019 estableció un nuevo récord de velocidad nunca antes visto por un coche de producción en serie. El Bugatti Chiron alcanzó los 490 km/h. Este modelo tiene un precio, previo a impuestos, de 2,65 millones de euros.