El BMW M340i xDrive Touring da motivos para seguir amando los coches familiares deportivos

El nuevo BMW M340i xDrive Touring ofrece casi las mismas prestaciones que la versión sedán pero con mayor capacidad de carga

Tras la presentación y comercialización del BMW M340i xDrive sedán los amantes de los BMW con carrocería familiar ansiaban la llegada de la variante más parecida a lo que entenderíamos como la versión ranchera del BMW M3.

Cierto que es que, con 370 CV, el BMW M340i xDrive Touring, supera incluso a referentes como son los BMW M3 anteriores a las generaciones del E90 y a sus variantes E92 y E93 y que, manteniendo aún el motor de 6 cilindros TwinPower Turbo, le permite ser considerado como el Serie 3 Touring más potente producido por M, a excepción del prototipo BMW M3 E46 y salvando las distancias con el Alpina B3 Touring.

Sea como fuere, este BMW M340i xDrive Touring se presenta con una carrocería familiar cuyas dimensiones se fijan en 4713 milímetro de largo, 1827 de ancho y 1440 mm de alto, lo que le permite disponer de una distancia entre ejes de 2.851 mm, y una capacidad de carga extendida con 500 litros de volumen del maletero, por los 480 del sedán, y hasta 1.510 cuando los asientos traseros se abaten, sin renunciar a las altas prestaciones que un modelo que pasa por el prisma del departamento M debe ofrecer.

Una ranchera muy racing

Así, retomando el apartado mecánico, el citado bloque de 2.998 centímetros cúbicos, 6 cilindros en línea, se apoya en un sistema TwinPower Turbo que produce 374 CV a 5.500 revoluciones y un par de 500 Nm desde tan solo 1.850 rpm para mover un coche que, en vacío, pesa 1.845 kg.

Esto supone añadir 75 más que el sedán y, aún así, marca un sprint en su aceleración de saliendo desde parado hasta alcanzar los 100 kilómetros a la hora de 4,5 segundos, tan sólo una décima más que el BMW M340i xDrive sedán.

Un poderío motriz que se asocia a una caja de cambios automático Steptronic de 8 velocidades que dirige su trabajo a las cuatro ruedas mediante la tracción xDrive y que, gracias al aporte de M, equipa un diferencial M Sport que modifica por completo el dinamismo del coche.

Igualmente, respecto de este apartado, el equipo de la suspensión también es diferente al resto de BMW Serie 3 Touring y monta un conjunto de amortiguadores y muelles M Sport y, como extra, puede equipar el control adaptativo de la suspensión Adaptive M.

Como todo lo que se mueve y acelera rápido, cuenta con un sistema de frenos M Sport acorde a la situación donde las pinzas delanteras cuentan con unas flamantes pinzas de cuatro pistones que muerden unos generosos discos de freno ventilados.

Con todo y esto, el esquema mecánico de este potente coche no le capacita para meterse dentro del grupo de los coches familiares con etiqueta ECO o CERO ni tampoco sus consumos homologados más modestos (9,7-9,2 en ciclo urbano; 6,3-5,9 en vía fuera de poblado y 7,6-7,2 en combinado) pero sin duda que le alza como una de las mejores rancheras para divertirse en su conducción.