Abarth 500 Pogea Racing: 331 CV de músculo compacto

Este pequeño utilitario puede ser la sombra incansable de cualquier deportivo que se precie dentro de un circuito. Para que el Abarth 500 lo logre, Pogea Racing ha trabajado en potenciar el motor, reducido el peso e instalado componentes de alto rendimiento que mejoren el control del vehículo.

Todo comienza por el propulsor de cuatro cilindros y 1,4 litros turboalimentado, del que han conseguido extraer 331 CV a 5.750 rpm y un par motor máximo de 411 Nm disponibles a 3.450 rpm, gracias a un intercooler más grande, una bomba de combustible adicional, inyectores modificados y pistones forjados, junto a un turbocompresor retocado y unos conductos de admisión y escape más grandes. Estas cifras de rendimiento del Abarth 500 permiten que alcance los 100 km/h en un sprint en 5,1 segundos, mientras que la velocidad máxima se situará en 262 km/h.

A una reducción de peso de 71 kilogramos que comprende, entre otros, la eliminación de los asientos posteriores, la sustitución de los asientos delanteros por baquets y el uso de fibra de carbono. El exterior también recibe modificaciones, como son el splitter y el difusor delantero, las entradas de ventilación, el difusor y el paragolpes trasero rediseñado.

Para mejorar el comportamiento del Abarth 500 dentro de la pista, Pogea Racing lo ha dotado de amortiguadores deportivos KW, pinzas de freno delanteras de seis pistones con discos perforados de 313 mm, mientras que en el tren posterior se conservan los del modelo 500 esseesse. Para mantener el contacto con el asfalto, unas llantas de aleación OZ Racing Superturismo GT en 17 pulgadas con neumáticos TOYO Proxes T1-R.